De momento se ha establecido una colaboración con Bricomart y Leroy Merlin, principales distribuidores de este producto en Palma, pero se trata de una campaña abierta a futuras colaboraciones.
Desgraciadamente, la imagen de sacos de escombros abandonados es demasiado frecuente en Palma, suponiendo un impacto ambiental y paisajístico muy importante, y un coste económico muy elevado para EMAYA y el Ajuntament.
Para esta campaña, EMAYA ha facilitado a los comercios el contenido de unas hojas informativas y carteles que ellos imprimen, distribuyen a los clientes y colocan en lugares visibles de los establecimientos.
En estas publicaciones se recuerda que está totalmente prohibido verter o abandonar escombros o cualquier resto de obra en la calle, solares o al medio natural. El vertido se sanciona con multas de hasta 1.500 € (en el caso de la vía pública, las sanciones pueden ser superiores al medio natural, en caso de reiteración o según la cantidad y el tipo de materiales).
Los ciudadanos pueden llevar los sacos de escombros a los parques verdes de Palma, en Son Castelló o Sant Jordi, que están abiertos a los residentes de Palma cada día, de lunes a domingo, de las 8 de la mañana a las 8 de la tarde.
Según el reglamento de los parques verdes, sólo se pueden depositar restos de obras domésticas, con un máximo de 15 sacas diarias. Tampoco se aceptan vehículos de carga superior a los 3.500 kg.
Desde que se aceptó el depósito de escombros en los parques verdes, a finales de 2015, la cantidad de restos que se vierten en estos espacios ha aumentado un 250%, pero aún es demasiado frecuente verlo en la vía pública o en solares.
Para incrementar aún más el uso de los parques verdes y terminar los vertidos, se ha iniciado esta campaña que se espera hacer extensiva a otros comercios y ámbitos.
