Este estudio forma parte de una campaña iniciada en el norte de Europa para denunciar los graves problemas de salud que ocasionan estas embarcaciones.
Así lo ha explicado el ingeniero de NABU Daniel Rieger en rueda de prensa, a la que se han sumado miembros de las asociaciones ecologistas de Amics de la Terra y el Grup Balear d'Ornitologia (GOB).
Para este sábado se espera un total de cuatro cruceros amarrados en el puerto de Palma, hecho que incrementa el nivel de contaminación en la isla.
Rieger ha destacado que la contaminación producida por un único crucero equivale a la de un millón de coches. Además, ha reiterado que el principal problema es no usar "filtros" y que el combustible empleado es de "mala calidad".
Además, el viento hace que la contaminación entre directamente a la ciudad, hecho que intensifica la gravedad de la situación. "Esto es muy malo para todos y malo para la salud de la gente ya que puede provocar cáncer y otras enfermedades".
Asimismo, Rieger ha informado que unas 50.000 personas mueren cada año por las emisiones de barcos, según cifras oficiales de la Unión Europea (UE).
En cuanto a posibles acciones para mejorar la situación, el alemán ha insistido en la posibilidad de tener filtros. "Hay tecnologías que permiten reducir la contaminación, pero la mayoría de las compañías de cruceros no lo hacen", ha añadido.
El último crucero esperado para este sábado ha amarrado sobre las 13.00 horas, dejando en tierra a unos 13.000 viajeros, sin olvidar los 5.000 tripulantes a bordo. "Los cruceros no respetan la gente local, no se interesan por lo que pasa en Palma", ha manifestado Rieger.
Por su parte, el Dr. Axel Friedrich ha explicado que las partículas contaminantes "ultra finas" que se encuentran en el aire, "son las más peligrosas porque entran en los pulmones y pueden llegar hasta el cerebro".
De este modo, este equipo de científicos ha estado realizando pruebas durante la mañana de este sábado y ha afirmado que puede interceptar el 99 por ciento de las partículas, incluso las más pequeñas.
Por su parte, el presidente de Amics de la Terra, Mariano Reaño, ha comentado que llevan tiempo denunciando a las instituciones esta problemática, y ha calificado de "útil" la disposición de los datos ofrecidos por el estudio de NABU.
"Somos ciudadanos de segunda categoría porque en el mar nórdico usan combustibles de más calidad que aquí", ha expresado Reaño.
Por último, desde el GOB han mostrado su apoyo a la iniciativa y han querido plasmar su preocupación por la situación actual. "Seguiremos midiendo, no podemos mantener un nivel de contaminación tan alto", ha dicho la miembro de la organización, Mercè Moroto.
