Según ha informado el Consistorio, es la segunda actuación de este tipo que se lleva a cabo en el municipio ya que el pasado martes se desalojó a otro grupo de personas acampadas en Cala Nova.
Desde el inicio de la temporada, la Policía Local controla las acampadas ilegales en el municipio. Así, se han levantado 65 actas de denuncia por acampada ilegal y 68 actas por infracción por comercio ambulante.
Las sanciones, han explicado, pueden llegar a los 3.000 euros en función de la gravedad ya que se han llegado a encontrar hogueras y acumulación de residuos peligrosos.
Según el Ayuntamiento, la mayoría de denuncias han sido interpuestas por la Policía, aunque también ha habido denuncias de particulares a través de la Línea Verde.
En todas las actuaciones se han detectado residuos de todo tipo o animales sueltos. Asimismo, se ha constatado que en la mayoría de los casos se realizaban hogueras en el bosque y en la playa, lo que supone un gran peligro.
El Ayuntamiento aprobó una ordenanza reguladora de acampadas, prohibiendo estas actividades en terrenos libres que no tienen las instalaciones y servicios necesarios para garantizar la seguridad y salubridad.
