La badalonesa, que ya fue oro en los 200 mariposa y plata en los 1.500 libre, perseguía otra medalla para aumentar su botín en este Mundial y lo consiguió en una carrera en la que tuvo que remontar en el 100 libre para llevarse la plata, la sexta de la delegación española en Budapest.
La carrera fue dominada de principio a fin por la húngara Katinka Hosszú, que se llevó el oro con 4:29.33, que es la mejor marca mundial el año, aunque quedó lejos del récord mundial que ella misma tiene desde el pasado verano en Río de Janeiro.
La magiar salió como un cohete y ya dominaba la prueba en el primer 50. En el parcial de mariposa, Hosszú era primera, Belmonte, segunda y la japonesa Yui Ohasshii, tercera. Belmonte mantuvo el tipo en el parcial de espalda. Para entonces ya evidenció una mejora de casi tres segundos con respecto al tiempo que había marcado en la serie matinal. Hosszú seguía por delante y la nipona, segunda.
En el segundo largo de braza, la española perdió algo de comba. Se metió en la lucha por las medallas la canadiense Pickrem hasta el punto que por el 300, Belmonte era cuarta.
Pero en el último cien, la española remontó, superó a la japonesa y a Pickrem para conseguir la plata con 4:32.17. Hosszú ganó con 4:29.33 y la canadiense marcó 4:32.88. Es la tercera medalla de Mireia Belmonte en este Mundial, ya que ha ganado una de oro y dos platas, y la número 44 que logra en una gran competición internacional.