Ensenyat y Garrido han insistido en que el desdoblamiento suma "mejora de la seguridad y protección del entorno" de forma que se dejarán de afectar 190.000 metros cuadrados de territorio respecto al proyecto de 2013. Se colocarán 60.000 m2 menos de asfalto que con el proyecto anterior, lo que según el presidente equivale a siete campos de fútbol.
El presupuesto de obra es de 38 millones de euros aunque con las expropiaciones el Consell prevé que ascienda a los 42 millones. Las obras empezarán previsiblemente en 2018 y durarán dos años y medio.
Ensenyat ha recalcado que el proyecto "forma parte de los acuerdos de gobernabilidad" y ha defendido que es "necesario para Mallorca" porque adecuará una vía "con un elevado índice de siniestralidad", además de que hay "entradas a fincas y caminos rurales que la atraviesan".
En este sentido, Garrido ha explicado que en 2015 se implantaron medidas extraordinarias de seguridad que redujeron los accidentes mortales, si bien la siniestralidad continúa siendo alta. La consellera ha apuntado que de la red de vías no desdobladas ésta es la segunda con más tráfico de toda Mallorca.
"MÍNIMO" TERRITORIO AFECTADO
La consellera ha insistido en que el proyecto "ocupa el mínimo territorio" posible y ha defendido que existe "una gran diferencia entre el proyecto que se expuso en 2013" y éste.
"Este proyecto no es una autopista, es un desdoblamiento. Tomamos la carretera actual y le añadimos dos carriles", ha dicho.
En esta línea, en lugar de vías de servicio tendrá caminos que respetarán la orografía actual de la zona y tendrán unos cinco metros de ancho. Además, dotarán la travesía de entrada a Campos de un paseo peatonal, vía ciclista y zona ajardinada y arbolada.
Asimismo, se verán afectadas más fincas por la inclusión de un nuevo tramo de 1,2 kilómetros en el proyecto.
COMISIÓN BALEAR DE MEDIO AMBIENTE
Por otro lado, Garrido ha explicado que han atendido las observaciones planteadas por la Comisión Balear de Medio Ambiente. Primero, se solicitaba la supresión del enlace más próximo al núcleo de Llucmajor porque se entendía que no era necesario y se podían ahorrar las 1,4 hectáreas que consumía. Este enlace permitía el paso de un lado a otro de la carretera, pero sólo tenía salida en sentido Llucmajor.
Ahora, sólo quedará un enlace, también subterráneo, que tendrá entrada y salida desde los dos sentidos. Sin embargo, se conservan, en el proyecto los dos pasos subterráneos para peatones y ciclistas que estaban previstos.
Desde la Comisión, también se pidió que el asfalto fuera fonoreductor y el proyecto ya preveía el uso de firme poroso. EstE asfalto, aparte de reducir el ruido, también expulsa el agua hacia los lados y evita inundaciones, según ha indicado el Consell. Finalmente, el desdoblamiento no afectará a la balsa de Son Sala.
ENCUESTA
Durante el acto, el presidente y la consellera insular han presentado una encuesta encargada "para conocer la aceptación y el estado de opinión de la ciudadanía sobre el proyecto".
Garrido ha rechazado que esta encuesta se haya hecho "para contestar a los grupos ecologistas" y ha insistido en que para ella "la mayor encuesta son las elecciones". Según ha indicado, la encuesta ha tenido un coste de 9.000 euros.
El 45,7% de los encuestados manifiesta sentirse seguro cuando circula por esta carretera, ante el 40,1%, que se siente inseguro. Asimismo, el 34,7% valora la carretera como bastante insegura, seguido del 30,8% que la considera bastante segura, y el 14,3% muy insegura. Sólo el 1,1% de los encuestados la considera muy segura.
A la pregunta de si es necesario mejorar la carretera, el 71,8% de los encuestados ha respondido afirmativamente, frente al 13,8% que cree que no. En cuanto al proyecto de mejora del Consell de Mallorca, el 73% lo apoya, casi un 20% no lo conoce y el 7,1% lo rechaza.
A la hora de plantear la reforma de la carretera, el 87,8% de las personas que han participado en la encuesta se ha decantado por la mejora de la seguridad, seguido del 25,8% que consideran que es más importante el menor consumo posible de territorio, o del 23,9% que cree que la carretera debe integrarse en el paisaje.