La Defensora de la Ciudadanía, Anna Moilanen, ha instado "una vez más" a los regidores del equipo de gobierno municipal a actuar en consecuencia ante los problemas que desde la Oficina de la Defensora se han detectado, como la falta desde hace meses de jefe en el departamento que concede las licencias de actividades en la Concejalía d'Urbanisme o las bajas del jefe de servicio y otro personal de la misma área.
Así lo ha reclamado durante la reunión de la Comisión de Derechos de la Ciudadanía celebrada este viernes, según lo ha señalado en un comunicado remitido desde la propia Oficina de la Defensora de la Ciudadanía de Palma
Según se indica, los problemas en Urbanismo "han ido en aumento desde la intervención judicial y ello ha repercutido sobre la gestión municipal causando retrasos de varios meses en el ejercicio de su actividad".
"Respecto a licencias de actividades y denuncias, el retraso es tal que en ocasiones la ciudadanía interpreta que resulta más ventajoso cometer una irregularidad que cumplir con los requisitos municipales y con la legalidad", ha advertido este organismo al respecto.
En otro orden de temas, la defensora ha pedido que el Ayuntamiento "actúe y busque una salida consensuada para recepcionar las barriadas en una situación irregular, como Bellavista, Son Gual II o sa Marina.
Así, se indica que Bellavista es una zona que inició su construcción en el año 1931 "sin que el Ayuntamiento haya sido capaz de solucionar los impedimentos por lo que se refiere a la recepción, como, por ejemplo, la valoración de los terrenos destinados al uso público".
Respecto a Son Gual II y sa Marina, la Oficina de la Defensora indica que estas barriadas están "sujetas a degradación a no ser que se les dé una regulación urbanística acorde con el modelo de ciudad".
Respecto a otros expedientes, la Defensora de la Ciudadanía, Anna Moilanen, y su adjunto, Vicente Rodrigo, han instado a las áreas de Movilidad, Infraestructuras, Urbanismo, Policía Local, Turismo, Comercio y Trabajo a coordinarse y buscar una solución conjunta con Asima a consecuencias del "caos circulatorio" que se produce en el polígono Son Castelló y "falta de seguridad para los peatones junto a múltiples irregularidades en relación con los aparcamientos, condición de las aceras, pasos cebra, locales de ocio y un largo, etcétera".
En esta línea, la Oficina de la Defensora de la Ciudadanía ha señalado que "los más afectados, junto a los trabajadores y clientes del polígono, están los vecinos de s'Indioteria y de las diversas urbanizaciones de la carretera vieja de Bunyola y alrededor del polígono".