Según detalla el Cuerpo, tras conocer a principios del mes de marzo sobre las presuntas actividades relacionadas con la práctica de partidas de cartas con cruce de dinero, que se realizaban en el interior de un establecimiento con la apariencia de un local destinado a la hostelería y sin la debida autorización administrativa, agentes del servicio de control de juegos de azar junto a agentes de la Comisaría Local de Manacor de la Policía Nacional, procedieron el pasado lunes a la entrada en el local, donde se estaban llevando a cabo varias partidas de carta con apuestas de dinero.
La Policía constató que las partidas donde más dinero se jugaba se encontraba al fondo del local, siendo el lugar más opaco y con mayor facilidad para hacer desaparecer las pruebas que pudieran incriminarles en una infracción, mientras que las mesas más cercanas a la entrada del local el dinero que se apostaba era menor.
El organizador, conocido en el mundo de juego y que ya anteriormente se le había propuesto para sanción por los mismos hechos ocurridos en otro local en febrero de 2016, utilizaba a varias personas como "aguadores" para intentar detectar a la policía para que les diese tiempo a reaccionar.
En el local, la Policía levantó un acta de Infracción, en la que se identificaban a 23 personas que en ese momento estaban realizando apuestas, además de intervenirse 7.115 euros, precintar el local y realizarse cinco actas más, por posesión de sustancia estupefaciente.
Según la ley de juego y apuestas de Baleares, el responsable de organizar las partidas y que regenta el local, se encuentra expuesto a una sanción estipulada como muy grave cuya multa oscila entre 30.001 hasta los 450.000 euros.
Mientras, los jugadores, al tratarse de una sanción estipulada como grave, podrían estar obligados a abonar una multa comprendida entre 3.001 hasta los 30.000 euros.
Las actas realizadas han sido remitidas a la Dirección General de Comercio y Empresa de la Conselleria de Trabajo, Comercio e Industria.
