El turista de 51 años fallecido en el Aeropuerto de Ibiza no murió de un golpe en la cabeza cuando intentaba saltar una cadena, sino que cayó desplomado, según han aclarado fuentes de la Guardia Civil.

Según se había informado en un primer momento, el turista había fallecido al caerse de cabeza cuando estaba saltando una cadena, si bien murió de causas naturales nada más llegar a la Isla cuando se encontraba haciendo una cola de pasajeros.

El suceso tuvo lugar sobre las 20.30 horas de este jueves. El turista procedía de Manchester y se intentó reanimarle, si bien no se pudo hacer nada por salvar su vida.