Para una combinación de luz y temperatura, en la playa de Cala Santanyí, hace unos años que cada verano el agua cambia de color, cogiendo un tono verde – amarillo. La causa de este enturbiamiento es un alga que fermenta al no regenerarse el agua en las calas estrechas o donde las corrientes no regeneran agua de forma frecuente. Se trata de Alexandrum Taylory, una micro alga que deteriora la imagen de la playa y que a veces preocupa a los bañistas.

Para acabar con esta problemática el Ajuntament de Santanyí instalará una bomba de propulsión submarina con una serie de cánones que hacen circular el agua y la regeneran, evitando la fermentación de dicha alga.

En otros municipios de Mallorca, como Andratx, ya se pusieron en marcha sistemas como este en verano de 2016. Por eso, el consistorio de Santanyí ya tiene todos los permisos solicitados y está a la espera de que la Demarcación de Costas autorice la instalación de la bomba. De hecho, el equipo de gobierno ya tiene preparada una partida de 40.000 euros para poder empezar a trabajar en el momento en que llegue la autorización.

Para el alcalde de Santanyí, Llorenç Galmés, es una prioridad que todas las zonas de baño del término municipal estén en las mejores condiciones posibles. “Nuestra playas son la mejor carta de presentación para aquellos que nos visitan y primordial para nuestros vecinos y negocios. Por eso hemos hecho todo lo posible para que estén en óptimas condiciones. El Ajuntament de Santanyí está preparado para poner remedio en el momento en que llegue la autorización”.