Los profesionales, trabajadores y empresas del transporte discreccional están en pie de guerra. La normativa del Govern les impide captar clientes en las puertas de salida de la terminal de Son Sant Joan y sólo les autoriza a transportar hacia sus destinoa vacacionales a aquellos viajeros que hayan precontratado el trayecto antes de su llegada a Mallorca.
El transporte discrecional es el que se realiza mayoritariamente con microbuses, que captan clientes hasta llenar un vehículo. Los precios son más económicos que en los taxis ya que viajan más personas en un solo vehículo.
Según la Associació de Transportistes de Servei Discrecional de Passatgers, esta norma balear es totalmente contraria a la estatal española y a la europea.
Además, denuncian que el autobús AeroTIB, impulsado por el propio Govern, les hace competencia desleal y también incumple la misma norma que les afecta a ellos, pero las autoridades y sus inspectores hacen la vista gorda ante este incumplimiento.