Durante su intervención, Soler se ha referido al informe publicado recientemente ACCOBAMS (Acuerdo sobre la conservación de los cetáceos en el Mar Negro, el Mar Mediterráneo y la Mar Atlántica Contigua), que retrata un aumento de áreas de la cuenca mediterránea que sufren una acumulación de actividades productoras de ruido submarino de origen antropogénico y que están poniendo en riesgo la supervivencia de poblaciones de fauna marina y, en especial, la de los cetáceos.
“Las conclusiones –ha indicado- muestran el aumento de presión acústica en el ámbito subacuático y señalan las actividades de adquisición sísmica y de búsqueda de pozos de petróleo y gas como principal causa”.
Por ello, el segundo punto de la moción insta al Ejecutivo a aprobar un “régimen riguroso de protección preventiva”, adoptando medidas estrictas de gestión de actividades productoras de ruido submarino mediante una norma que dé soporte jurídico a la protección de este espacio y que esté en vigor hasta la aprobación del correspondiente instrumento de gestión de la ZEPIM.
En este sentido, la senadora mallorquina ha explicado que el informe desprende que en 2005 el área afectada por sondeos acústicos era de un 3,8%, mientras que en 2013 este porcentaje había aumentado hasta el 27% de la superficie.
“Estos puntos negros de ruido submarino han puesto en evidencia que su localización coincide con áreas de gran importancia para las especies de mamíferos submarinos entre las costas de Baleares, Cataluña y la C.A. Valenciana, por donde discurre un Corredor Migratorio de Cetáceos de gran valor ecológico”, ha explicado.
Asimismo, otro de los puntos que recoge la iniciativa del PP pide al Ejecutivo seguir trabajando en la implementación de registro de ruido, diseñado por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, y que se ha reportado a la Comisión Europea como parte de los programas de seguimiento de las estrategias marinas.
En este punto, Catalina Soler ha recordado que el Ejecutivo “es plenamente consciente la amenaza acústica y de la importancia del espacio marítimo por donde discurre el corredor de migración de cetáceos”.
Por ello, el Gobierno ya ha dado los primeros pasos para iniciar oficialmente el procedimiento de declaración de este espacio marítimo como Zona Especialmente Protegida de Importancia para el Mediterráneo (ZEPIM), y que estará acompañado de un plan de ordenación en el que se detallarán las medidas de protección y de gestión aplicables a esta zona, así como los medios para su ejecución.
Antes de concluir, ha agradecido la sensibilidad del Gobierno ya que “para nuestro país la conservación del mar Mediterráneo es esencial no solo para asegurar sus valores ecológicos, sino por la importancia socioeconómica de este ecosistema del cual dependen el turismo y la pesca marítima”.