La Guardia Civil de Málaga en colaboración con la de Barcelona y autoridades españolas en Turquía localizaron y participaron en la deportación de las jóvenes.
Este pasado viernes el ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, confirmó que la joven de Torrox estaba recibiendo "asistencia consular" en Estambul, donde estaba detenida a la espera de ser deportada, para poder volver a su "vida normal".
El pasado miércoles una mujer residente en el municipio malagueño de Torrox denunció ante la Guardia Civil la desaparición de su hija, de 28 años, que se encontraba en Turquía junto a su pareja, una mujer musulmana junto a la que había huido de Dubái (Emiratos Árabes) tras ser denunciada esta por su propia familia debido a su relación homosexual.
La desaparecida, que trabaja en Londres, había viajado unos días antes a Dubái junto a su pareja --una mujer de nacionalidad egipcia, pero con residencia en este emirato-- para visitar a la madre de ésta, pues la habían avisado de que se encontraba gravemente enferma, pero al llegar descubrieron que no era así y que, al parecer, todo era una estrategia del padre "para retenerla en ese país".
Entonces, según la madre de la joven, tuvieron que escapar del país y recalaron en Georgia, donde, tras pasar tres días en casa de unos amigos, iban a tomar el vuelo de regreso pero tampoco pudieron.
Tras la denuncia y la colaboración de las autoridades españolas, se localizó a las jóvenes, que están ya en España.
Fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Málaga y de la Guardia Civil han informado poco después de esta medianoche de que agentes del instituto armado de Málaga y Barcelona, en colaboración con autoridades españolas en Turquía, habían participado en esta deportación, que inicialmente se anunció que sería a Londres, donde reside María Jimena, de 28 años.
El cónsul de Estambul se personó en la mañana de este viernes en el centro donde estaban retenidas para llevar a cabo los trámites que permitieran su salida del territorio turco, según la familia de María Jimena, que vive en Torrox (Málaga).
La hermana de esta, María del Valle Rico, aseguró este viernes que cuando pudo hablar con ella le dijo que "quería volver a España" y que eso es lo que deseaba la familia, que previamente pidió ayuda a las autoridades españolas para localizar a María Jimena, de la que no sabían nada desde el pasado lunes.
María y Shaza intentaron volar la semana pasada desde Dubái (Emiratos Árabes Unidos), donde residen los padres de la egipcia, a Londres, con escala en Tiflis (Georgia).
Al parecer, el padre de Shaza las había denunciado ante las autoridades de los Emiratos Árabes Unidos por su relación homosexual.
Cuando querían seguir su viaje a Londres, fueron interceptadas en el aeropuerto de Tiflis por el padre de Shaza, junto a una abogada, para impedir que su hija saliera hacia Georgia.
En un altercado, el padre destruyó el pasaporte de Rico, pero las dos jóvenes lograron escapar y cruzaron a pie la frontera hacia Turquía y allí tomaron un autobús hasta Samsun, en la costa del Mar Negro, donde la Policía turca les detuvo al entrar sin documentación en el país.
Tras doce horas de arresto fueron puestas en libertad y viajaron en autobús hasta Estambul, donde fueron detenidas de nuevo por la policía turca y llevadas a un centro de deportación.