Según han explicado este viernes en un comunicado, el principal encausado, y otras cuatro personas que figuraban como testaferros de nueve empresas, defraudaron a la Seguridad Social más de 286.400 euros.
El empresario, que había trabajado como director de un establecimiento de hostelería, creó un entramado de nueve empresas, poniendo a cuatro de sus trabajadores, como testaferros de las mismas, las cuales ofrecían diferentes servicios de hostelería a un hotel de Cala Pi.
De esta manera, empleaban a numerosos trabajadores, algunos de ellos contratados en el extranjero con ofertas de trabajo fraudulentas, a los que les exigía largas jornadas laborales, desde las 06.30 horas hasta las 21.00h de lunes a a domingo por sueldos de entre 750 euros a 900 euros y sin darles de alta en la Seguridad Social.
La investigación ha sido realizada por el Grupo primero de la UCRIF de la Jefatura Superior en Baleares y se ha detenido al empresario y a los cuatro testaferros implicados en la trama.