De este modo, esta primera edición del estudio de inserción laboral expone que el paro afecta al diez por ciento de los graduados, mientras que el nueve por ciento se clasifican como inactivos, al no estar buscando trabajo en el momento de la entrevista.
Del total de exalumnos trabajando, el 68 por ciento encontraron un empleo antes de que pasaran seis meses desde que acabara sus estudios en la UIB.
Según el contrato, el 49 por ciento de los encuestados trabajan con un contrato temporal, el 35 por ciento con un fijo, el 13 por ciento son autónomos y el resto son becarios o no tienen contrato.
Además, el estudio revela que el 78 por ciento de los graduados trabajan con una jornada de tiempo completo y que el 63 por ciento de ellos están ocupando un puesto en el sector privado.
Respecto a los requisitos para entrar en el mundo laboral, al 80 por ciento de las personas ocupadas les exigieron la titulación universitaria para acceder a su puesto de trabajo y el 82 por ciento desarrolla funciones de nivel universitario.
A nivel salarial, el 44 por ciento tienen actualmente un sueldo bruto anual superior a los 18.000 euros.
Las encuestas se realizaron telefónicamente durante los meses de septiembre y octubre de 2016, y se obtuvieron respuestas de 592 de los 989 alumnos que finalizaron sus estudios en el año 2013.