Según ha informado el Instituto Armado en un comunicado, los investigados se publicitaban a través de una red social y, cuando los clientes contactaban con ellos, les solicitaban el pago por adelantado.
No obstante, cuando los turistas llegaban a la Isla se encontraban que el piso alquilado no existía y no podían contactar con los arrendadores ni con la inmobiliaria, con lo que quedaban desamparados hasta que conseguían encontrar un alojamiento por sus propios medios.
Tras tener conocimiento a través de una denuncia, la Guardia Civil abrió una investigación en la que se localizó a los investigados y a una víctima más. Por el momento se han conseguido localizar a dos perjudicados de nacionalidad británica, siendo la cantidad estafada de alrededor de 5.00 euros.
La investigación continúa abierta y no se descarta la localización de más estafados.