Según recoge La Vanguardia, el extesorero del PP asegurado también que fue el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien decidió cortar la relación del PP con las empresas del cabecilla de la Gürtel, Francisco Correa, tras ser avisado por un empresario de sus actividades ilícitas. “Le hicieron una envolvente a Correa”, ha asegurado ante el tribunal que le juzga por su relación con la trama. A partir de ese aviso, que llegó al presidente de mano del dueño de Licuas y de su yerno, Bárcenas recibió órdenes de dar por finalizadas todos los contactos.
En opinión de Bárcenas a Correa “se le subió a la cabeza” el nivel de relaciones que tenía en el PP que le hacían sentirse como una persona importante. “Estaba todos el día en el partido y por eso el partido debía hacer lo que él dijese”, ha asegurado.
Bárcenas, que se ha sentado en la silla reservada a los acusados acompañado de un grueso maletín del que ha extraído varias carpetas y que ha reconocido la existencia de una caja B en el Partido Popular, ha explicado en el arranque de su declaración, que su trayectoria laboral se ha centrado en actividades empresariales en banca y en grupos privados. “Durante un periodo de tiempo he sido el gerente de Alianza Popular primero y después del PP hasta el verano del 2009. Estuve cobrado hasta el mes de enero del año 2013”, ha dicho.
En cuando a sus ingresos por esas actividades en España, Bárcenas ha explicado que está “todo declarado, absolutamente todo”. “He tenido en liquidez, un saldo importante durante prácticamente toda mi vida”, ha puesto de manifiesto.