El conseller Vicenç Vidal ha pedido al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente hacer uso de la palabra para reivindicar el papel de las autonomías tanto para la reducción de emisiones como para la gestión sostenible del agua y la biodiversidad.
En el orden del día aparece una actividad legislativa que tiene que ver con la propuesta de revisión de los sectores no sujetos al régimen de comercio de derechos de emisiones (ETS) y dos no legislativas: los proyectos de conclusiones del Consejo sobre el Convenio de biodiversidad biológica y sobre la gestión sostenible del agua.
En estos puntos, Baleares han perseguido una postura común de todas las comunidades, que también tiene en cuenta la idiosincrasia del archipiélago.
Así, en el Convenio sobre biodiversidad biológica (CBD) se ha conseguido tratar la afectación de los ruidos en el mar y la incidencia en este ámbito de los microplásticos y de la contaminación, que provocan la pérdida de biodiversidad marina y costera.
Precisamente en este mismo documento se ha introducido el punto de las especies invasoras como prioritario, para poder controlar las vías de entrada.
Con respecto a las emisiones, las comunidades autónomas acogen positivamente las propuestas relativas a la reducción de los sectores no cubiertos por el régimen de comercio de emisiones que presentó la Comisión Europea el 20 de julio pasado y recuerdan que representan un papel esencial en la consecución del objetivo asignado al Estado por la importancia de la aplicación de la estrategia de mitigación y de adaptación al cambio climático a escala regional.
Por eso, el Govern se ha mostrado "preocupado" por que no se reconozca el papel clave de las autonomías y que no haya recursos financieros asociados.
Las autonomías también subrayan la necesidad de propuestas coherentes "haciendo notar que no se entiende que en la lucha contra el cambio climático se pongan limitaciones al autoconsumo" y de sinergias con otras políticas comunitarias relacionadas, como la PAC o la economía circular.
La postura común de las autonomías señala que "para llegar al objetivo previsto para 2030 es fundamental la contribución del uso del suelo y de los bosques", igual que la recuperación de los ecosistemas marinos, y "se tiene que introducir la posidonia como elemento de reducción del CO2".
Asimismo, en la gestión sostenible del agua las comunidades autónomas subrayan que las aguas de la Unión Europea "soportan una fuerte presión por varios motivos, hecho que compromete la garantía del abastecimiento y potencia los efectos negativos de la sequía y la escasez de agua, especialmente en el arco mediterráneo".
Por eso consideran "imprescindible" una dotación económica para que las regiones puedan restaurar los ecosistemas degradados.
El conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, ha solicitado intervenir en catalán en el Consejo de Ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea, para lo que ha sido autorizado.
Ahora bien, el conseller sólo podrá defender la postura común de las comunidades si se lo permite a la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente en funciones, Isabel García Tejerina, a quien también ha solicitado por escrito poder ejercer este derecho.