En la misiva afirma que presentó su renuncia como fruto de una decisión "tomada libremente, después de haber orado al Señor y asistido por el consejo de personas de criterio humano y eclesial, mirando lo mejor para la Diócesis". Asimismo, agradece que el el Papa Francisco haya querido confiarle "benévolamente" un nuevo encargo pastoral como Obispo auxiliar de Valencia.
Salinas, obispo de Mallorca desde 2012, se ha defendido de las informaciones que en diciembre del año pasado apuntaban a que habría mantenido una supuesta ‘relación impropia’ con Sonia Valenzuela en el Palacio Episcopal, una mujer casada que llegó a ser su asistente personal. El hasta ahora obispo de Mallorca ha asegurado que no tenía “nada que ocultar” y que estaba convencido “de haber actuado convenientemente”, aunque reconoció que se podían “haber malinterpretado” sus actos.