El pasado mes de marzo, guardias civiles de Tráfico detectaron una posible estafa en la venta de vehículos de segunda mano que se estaban vendiendo a través de Internet a precios mucho más bajos de mercado, según destaca la Bnemérita.
Así, de las primeras investigaciones realizadas, los agentes averiguaron que se trataba de vehículos a los que se les había manipulado el cuentakilómetros, restándole kilometraje con el fin de hacerlos pasar por menos usados de lo que realmente lo habían sido.
Según apunta Europa Press, con la colaboración del Departamento de ITV del Consell de Mallorca y de la Jefatura Provincial de Tráfico en Illes Balears, se localizaron e inspeccionaron estos automóviles y tomó declaración a los posibles perjudicados y testigos, lo que permitió confirmar dicha modificación ilícita de kilómetros, constitutiva de un delito de estafa continuada.
De esta forma, del resultado de las investigaciones, se pudo determinar la existencia de varias empresas de Mallorca dedicadas al arrendamiento de vehículos, las cuales los explotaban de manera intensiva para, tras reducirles el kilometraje, venderlos en el mercado de segunda mano. Para ello utilizaban intermediarios que los anunciaban en Internet, y en algunos casos los vendieron directamente.
La manipulación del cuentakilómetros la realizaban para que marcara una cantidad significativamente inferior a la real, casi siempre menor a la "barrera psicológica" de los 100.000 kilómetros, de manera que los hacían más atractivos para el comprador, simplificando con ello la venta, permitiéndoles obtener mayores beneficios económicos.
Gracias a la investigación realizada se ha podido detectar hasta la fecha la venta de 65 vehículos con los odómetros manipulados, con una rebaja que ascendería a más de 3 millones de kilómetros y con un total de 37 perjudicados.
La Guardia Civil ha señalado que continúa la investigación y que no descarta localizar más vehículos manipulados, así como perjudicados y personas implicadas en esta estafa.
