En playas como Cala Santanyí, Cala Mondragó, Cala Gran o Cala Llombards se instalaron bases de madera para las duchas, contenedores de reciclaje y dispensadores de ceniceros. En concreto, en Cala Mondragó se implantaron hasta cuatro duchas y en Cala Gran un nuevo parking para bicicletas, además de pasarelas para facilitar el acceso de los aparcamientos hasta la orilla del mar y cuatro barreras para mejorar el impacto visual de los contenedores.
Tras un balance realizado por parte del Consistorio del municipio se ha llegado a la conclusión que los resultados de estas mejoras han sido muy positivos y están "muy" satisfechos, confiesa la Regidora de las playas del Ajuntament de Santanyí , Bárbara Xamena Bordoy.
Por eso, desde el Ayuntamiento aseguran que de cara al verano que viene se volverá a invertir una buena parte del presupuesto para mejorar las condiciones de las playas con nuevos servicios más modernos.
La compañía encargada de estas mejorías ha sido la empresa municipal SEMESA.